Por/ Roberto Guaspe Navarro rwaspe@cmkv.icrt.cu
Los trabajadores
pecuarios, diseminados por la
Unidad Básica de Producción Cooperativa -UBPC Antonio Maceo
de la zona de Centeno y por el resto de las cooperativas del municipio,
realizan esfuerzos extraordinarios para cubrir la alimentación del ganado y
garantizar a su vez, una producción de leche estable.
Desde hace algunos
años se tenía la idea de crecer con nuevas micro-vaquerías en las comunidades
suburbanas del territorio minero metalúrgico, pero el proyecto afronta limitaciones,
precisamente por la falta de agua y el alimento necesario que demandan las
reses, y por supuesto las vacas en ordeño.
A pesar de esos
inconvenientes los actuales propietarios del ganado vacuno y los propios “ubepecistas” de Centeno, buscan espacios
para mantener los pastos y forrajes que necesitan los animales con el agua
suficiente.
Los ganaderos dicen
que no pretenden crecer con la masa sino cruzarla con razas más resistentes y
de alta producción de leche, de ahí la ambiciosa meta de cerrar el año con más
de 100 mil litros, que se traduce en
mayor ahorro financiero con la reducción de las importaciones de leche en
polvo.
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