miércoles, 28 de agosto de 2013

Testimonios de pobladores moenses que dialogaron con Fidel en su primera visita al territorio hace 47 años




Por/ Félix Ramón Lobaina          Fotos del autor       flobaina@cmkv.icrt.cu


Eutiquio Rodríguez Gámez con 86 años de edad.
“Quiero a Fidel como si fuera mi padre, voto por su recuperación y el deseo  de poderles  estrechar nuevamente sus manos”, expresó emocionado Eutiquio Rodríguez Gámez, quien conoció al Comandante en Jefe, cuando realizó su primera visita al municipio de Moa los días 26 y 27 de agosto de 1966.

Eutiquio con sus 86 años de edad a cuesta, recuerda que como campesino residente en La Melba en esa fecha, dialogó con el máximo líder un buen rato, ya que Fidel se interesó por la situación de los pobladores de aquel lugar tan intrincado.

Además, que fue un orgullo para ellos, que Fidel preguntó por su esposa que estaba recién parida y se realizaron fotos con la familia. Eso lo recuerdo toda la vida. También me becó a una de sus hijas para la Escuela Ana Betancourt en La Habana. “A Fidel y a Celia Sánchez, les tengo gratos recuerdos”, recalcó Eutiquio Rodríguez Gámez, quien hace varios años reside en el Reparto Caribe, en Moa.
Por su parte su hijo Eutiquio Rodríguez Rodríguez, más conocido por “Chicho” y actual trabajador de la Empresa Comandante Ernesto Che Guevara, recuerda de aquella histórica visita de Fidel a La Melba, donde vivía con solo casi 9 años de edad.

Eutiquio Rodríguez (Hijo Chicho)
Cuenta, que como niños cuando supieron de la presencia de Fidel allí, corrieron hacia donde estaba, y les permitió llegar y los cargó a todos. Seguidamente se interesó por su escuela que estaba en muy mal estado, la visitó, preguntándoles su nombre “Inocencio Villalba”, si eran pioneros, en sí dialogó sobre varios temas con ellos, del Río Jiguaní y Arroyo Bueno, donde los niños se bañaban, porque no tenía mucha profundidad, etcétera.

Recuerda “Chicho”, que Fidel cuando pasó de regreso por su escuelita, les dijo: “Ustedes van a tener una escuela mejor”, y así fue a los pocos meses ya tenían una nueva con mejores condiciones en su comunidad. Además en la foto con su familia, el Comandante en Jefe le puso el codo en su cabeza.

Ana Silot Labañino, tenía cuando la visita de Fidel 23 años.
Pero, Fidel  procedente de Baracoa, antes de llegar  a los parajes intrincados de La Melba de Moa, sostuvo también un encuentro con los vecinos del barrio moense de Quemado del Negro. Allí sucedió parecido.

Ana Silot Labañino, quien ahora cuenta con 70 años de edad, tenía sólo 23 cuando conoció al máximo líder de la Revolución Cubana, a quien lo quiere con el alma.  “Fidel para mí es mi todo, es lo más grande de este mundo”, expresó.

Ella recuerda, que cuando Fidel llegó a Quemado del Negro, tomaron agua en su casa, ya que ella conocía a uno de sus guardias personales. Además participó en las fotos que allí se hicieron con motivo de la visita a ese barrio rural.

Agregó Ana Silot Labañino, que al día siguiente, el 27 de agosto de 1966, cuando Fidel se traslada hacía Moa y además de recorrer las minas y la Fábrica Comandante Pedro Sotto Alba, les habla al pueblo en el Parque Pedro Sotto, allí estaba ella junto a decenas de moenses que se dieron cita en el lugar para apoyar las palabras del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.

Allí en ese acto hace 47 años, Fidel dijo: “Haremos de Moa una comunidad vanguardia de trabajadores socialistas”.

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