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Presilla con dos trabajadores del níquel |
A los 91 años
de edad, falleció en Moa, aquel 3 de marzo del año 2006, Demetrio
Presilla López, Héroe del Trabajo de la República de Cuba,
legendario maestro de la
Metalurgia, a quien siguieron muchos hombres en jornadas
intensas después que el Che indicó echar a andar la Empresa Comandante
Pedro Sotto Alba, próxima a cumplir 54 años de producción y de gloria.
Casi todos creían muy difícil mover nuevamente las máquinas del complejo proceso industrial de lixiviación ácida luego de marcharse los funcionarios norteamericanos que operaban la planta de níquel. Sin embargo, haciendo honor a la confianza del Comandante Ernesto Guevara, entonces Ministro de Industrias, el ingeniero Demetrio Presilla López, lideró la proeza.
Muchos años después, afirmó en una entrevista al periodista Luis Báez -recién fallecido- que el Che nunca le negó su apoyo, sabiendo que él no era socialista ni comunista, pero convencido de que era un hombre honesto.
Contó también el líder principal del arranque de la industria en el libro Los que se quedaron, de Báez, que “era una planta muy moderna, que los norteamericanos la habían terminado de construir a raíz del triunfo de la Revolución y la dejaron abandonada.”
La Fábrica Pedro Sotto en la década del 60. |
Él nunca se preocupó por títulos, homenajes… ni siquiera por lucir bien ante los demás. No actuaba por lo material, ni se marchó a los Estados Unidos, donde había estudiado y le proponían prosperidad.
Él era un patriota, con personales conceptos filosóficos no siempre bien comprendidos por algunos, como escibió el periodista holguinero Alexis Rojas Aguilera, quien lo conoció de cerca. “No le gustaban las entrevistas, le mortificaba la pérdida de tiempo y no le interesaban los cargos. Presilla era sencillamente técnico e investigador”.
Fue, ciertamente, un rebelde contra todo lo que no entendiera, enemigo de estrecheces mentales, solía llamar a las cosas por su nombre.
Un hombre fiel, de vergüenza, de ética sólida y amplia cultura general, que leía a William Shakespeare o Walt Whitman en el idioma materno de los escritores, por la desconfianza en las traducciones”.
Presilla, como le decían todos en Nicaro y Moa, vivió consagrado al trabajo en la tierra que lo vio nacer, su “obsesión” por los conocimientos científicos y su actitud de patriota, lo hicieron un hombre clave en la Industria Cubana del Níquel, ayudando también a la puesta en marcha de la segunda fábrica de níquel del municipio más oriental de Holguín: la Empresa Comandante Ernesto Che Guevara.
Con los años, Presilla dejó de caminar por las plantas de Moa, pero nunca olvidó que la tierra es la Madre de todo, pues mientras tuvo fuerzas, no abandonó las labores del campo que disfrutaba en Cabonico, ni la cría de animales, con los profundos conocimientos que tenía como perito agrícola.
Demetrio Presilla López nació en febrero de 1915 en Mayarí, tierra donde fue enterrado hace 5 años.
Desde 1942 se vinculó a la industria de Nicaro, para no abandonar jamás el sector de la minería, al igual que tampoco abandonó a su pueblo hasta el día de su muerte.
Tuve el honor de conocer y trabajar
ResponderEliminarcon Demetrio Presilla , un hombre
respetuoso y sencillo.Aunque era
un genio jamás se jactó de serlo.
Lo conocí tan de cerca q podria
contar muchas anécdotas de ese
"Super Héroe del trabajo " y de
ese ser humano tan humilde, al
cual admire siempre.Aunque lejos,
senti su partida.QED
Era mi abuelo !!! El padre de mi padre y aunque no tuve la gran oportunidad para poder disfrutar de él porque no vivía en La Habana me quedo con los lindos momentos y recuerdos vividos !!!! Lo recordamos con gran admiración !!! Un saludo
EliminarPor favor, necesito Danis contactar con usted sobre su abuelo y famiia espero me escriba a jmiranda@cil.moa.minem.cu o localizarme por Facebook con el messeger JORGE MIRANDA LOPEZ MIRANDA LOPEZ o llámamrme en Cuba gratis al móvil 59969088 de cualquier teléfono fijo en Cuba Saludos cordiales
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