miércoles, 8 de octubre de 2014

Níquel con menos costos de producción y mayor eficiencia metalúrgica


Por/ Roberto Torres de la Torre

Aunque operar una industria por debajo de su potencial tecnológico equivale a desaprovecharlo parcialmente, en el caso de la Productora de Níquel y Cobalto Comandante Ernesto Che Guevara, de Moa, es una bien pensada estrategia, propia de los cubanos acostumbrados a crecerse ante las adversidades.

Giovanni Aldana Espinosa, director adjunto de esa empresa del Ministerio de Energía y Minas, reveló que este año la producción será de 14 mil 700 toneladas, muy por debajo de la capacidad instalada hace más de 25 años, cuando fue puesta en marcha. 

Sobre los motivos, precisó: "Se tomó la decisión de paralizar los equipos menos eficientes, prácticamente media planta. El plan ajustado del Dos Mil 14 lo vamos a cumplir y, como estamos operando con los más eficientes, sobrecumpliremos la producción con índices de eficiencia metalúrgica por encima del 72 por ciento", dijo.

El joven ingeniero afirmó que en este año la "Che Guevara" promedia más de 40 toneladas diarias; en agosto fueron 44 en un momento en que los precios de este rubro exportable son superiores a los pronosticados.

En consecuencia, la Planta de Punta Gorda, como se le conoce en el mercado internacional, trabaja con menos costos de producción y un alto nivel competitivo, pues vende níquel de primera y segunda calidad.

Como se sabe, nuestro níquel tiene ante sí la barrera del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba, que encarece los gastos en la compra de materias primas de calidad y limita drásticamente el número de compradores por miedo a la extraterritorialidad de la Ley Helms Burton.

En cualquier otro país, incluidos los más industrializados, y en medio de la actual crisis económica mundial, una fábrica así como la "Che Guevara" habría despedido a sus trabajadores parcial o totalmente para cerrar sus operaciones o fusionarse en un conglomerado industrial. 

Los cubanos, en cambio, asumen la descapitalización de muchos equipos como un gran reto para mantener activa a la primera fábrica de níquel construida por la Revolución. Es por ello que los encargados de las reparaciones y los mantenimientos laboran hasta 12 horas diarias con el fin de devolverle la norma potencial calculada para el año. 

Recuérdese que la obtención del níquel a partir del mineral laterítico es un proceso fuerte que deteriora las estructuras metálicas, debido a las sustancias químicas altamente corrosivas que se emplean en las líneas de producción de este emporio industrial con la tecnología de carbonato amoniacal.

Sin embargo, con el multimillonario plan de mantenimientos y reparaciones puesto en marcha, la "Che Guevara", de Moa, quedará en condiciones de producir 30 mil y más toneladas de níquel más cobalto al año; no será nada fácil, pero tampoco imposible.

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